La responsabilidad supone un concepto muy amplio, pues cada persona tiene responsabilidades diferentes. Por ejemplo: si le preguntas a un niño o adolescente, seguramente dirá que para él este valor se basa en ir a la escuela, hacer sus tareas y recoger su habitación. En cambio, si le preguntas a un papá o mamá responsable de la familia, éste dirá que trabajar, cuidar y dar sustento a sus hijos es su responsabilidad. O si le preguntas a un presidente, contestará que sus responsabilidades son cumplir las promesas que hizo a sus votantes y regir el país con sabiduría. Pero al final, todos nos hacemos cargo de algo y de nosotros depende si lo ejecutamos bien o no. En este sentido, podemos decir que si no hacemos lo que nos corresponde, sufriremos los efectos negativos que esto nos traiga, y así, podemos dar otro concepto de responsabilidad, pues ésta también implica ser conscientes y afrontar las consecuencias de nuestros actos.
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